Blesa hizo ascos a invertir su dinero en preferentes, mientras presionaba a su equipo para colocarlas a los clientes
El presidente de Caja Madrid mostró reparos a la gestora de su patrimonio: “No estoy muy seguro de querer invertir tanto en esos plazos”
ELPLURAL.COM | 30/12/2013
El expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa impulsó la emisión de preferentes entre los clientes de la entidad a sabiendas de que les estaba engañando y que existían riesgos de que no recuperaran la totalidad de su dinero, pero él se cuidó mucho de arriesgarse con este producto y dio órdenes de mesura a la gestora de su patrimonio para que no invirtiera más de 150.000 euros, a pesar de que tenía disponibles más de cinco millones de euros.
Caja Madrid, al servicio de sus propios intereses
Blesa dio probadas muestras de que tenía muy pocos escrúpulos durante su gestión de Caja Madrid. Puso la entidad a disposición de sus propios intereses y de altos dirigentes del PP, entre ellos, el expresidente del Gobierno José María Aznar, amigo íntimo y compañero en negocios como el de la industria armamentística.
Blesa dio probadas muestras de que tenía muy pocos escrúpulos durante su gestión de Caja Madrid. Puso la entidad a disposición de sus propios intereses y de altos dirigentes del PP, entre ellos, el expresidente del Gobierno José María Aznar, amigo íntimo y compañero en negocios como el de la industria armamentística.
El correo a su gestora
Los correos de Blesa en Caja Madrid están permitiendo conocer cómo era la forma de operar del banquero. Según adelanta este lunes El Mundo, en mensajes que envió a Marta Alonso, la gestora de su patrimonio en Altae, filial de banca privada de Caja Madrid, Blesa ordenó que se invirtiera sólo un 3% de sus inversiones en las preferentes.
Los correos de Blesa en Caja Madrid están permitiendo conocer cómo era la forma de operar del banquero. Según adelanta este lunes El Mundo, en mensajes que envió a Marta Alonso, la gestora de su patrimonio en Altae, filial de banca privada de Caja Madrid, Blesa ordenó que se invirtiera sólo un 3% de sus inversiones en las preferentes.
La gestora hablaba de una supuesta remuneración del 7%
Fue el 12 de mayo de 2009, cuando Marta Alonso le menciona la emisión de preferentes que Caja Madrid haría pública nueve días después. La entidad necesitaba capitalizarse y tenía difícil financiarse en los mercados, así que lanzó una emisión de 3.000 millones de euros con el señuelo de que “los títulos tendrán una remuneración del 7% fija durante los cinco primeros años, mientras que a partir del quinto año pasará a ser del Euribor a tres meses más 4,75%”, según expresaba en el correo su gestora.
Fue el 12 de mayo de 2009, cuando Marta Alonso le menciona la emisión de preferentes que Caja Madrid haría pública nueve días después. La entidad necesitaba capitalizarse y tenía difícil financiarse en los mercados, así que lanzó una emisión de 3.000 millones de euros con el señuelo de que “los títulos tendrán una remuneración del 7% fija durante los cinco primeros años, mientras que a partir del quinto año pasará a ser del Euribor a tres meses más 4,75%”, según expresaba en el correo su gestora.
“Querido Presidente: Tal y como te comenté, hicimos las compras de Telefónica, Repsol y ENAGAS, y además compré un ETF sobre el Eurostoxx 50, pero con una pequeña partida, porque mi intención es seguir entrando aprovechando los recortes que tienen que venir, y pensando que ya hemos visto los suelos”, constaba en el correo.
“No estoy seguro de querer invertir”
Un día después, Miguel Blesa respondió a su gestora: “Hablaremos de las preferentes, no estoy muy seguro de querer invertir tanto en esos plazos”. El entonces presidente de Caja Madrid ordenó una inversión mínima en ese producto, es posible que sólo con el fin de evitar la mala imagen ante su equipo de no invertir ni un euro, después de sus presiones para que movieran el producto entre los clientes de la caja.
Un día después, Miguel Blesa respondió a su gestora: “Hablaremos de las preferentes, no estoy muy seguro de querer invertir tanto en esos plazos”. El entonces presidente de Caja Madrid ordenó una inversión mínima en ese producto, es posible que sólo con el fin de evitar la mala imagen ante su equipo de no invertir ni un euro, después de sus presiones para que movieran el producto entre los clientes de la caja.
FUENTE: www.elplural.com
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